lunes, 12 de diciembre de 2011

Clásicas diferencias

Por: Pablo Rios González

Barcelona venció una vez más al Real Madrid y este encuentro dejó varios detalles para analizar. Los DTs, como siempre, tuvieron mucho que ver. El Clásico del sábado, a pesar de que tuvo como resultado el que más se ha venido dando últimamente, dejó un sabor diferente. El Merengue llegaba de la mejor manera; líder absoluto con tres puntos de ventaja en La Liga, puntaje perfecto en Champions y un récord histórico de 15 victorias consecutivas después de 50 años. Todo esto de la mano de José Mourinho.

El Madrid era el favorito pero enfrente iba a tener a su eterno rival. El Barça llegaba casi que con la obligación de ganar si no quería que el Blanco se le siguiera escapando en la pelea por conseguir el título de La Liga. La influencia que tuviera la palabra de Guardiola sobre sus jugadores iba a ser fundamental a la hora de enfrentar este encuentro.

Durante todo el primer tiempo se vio en el equipo merengue lo que Mourinho –quien curiosamente había preferido tener un perfil bajo en la previa- pretendía: una fuerte presión en la parte de arriba. Esto hizo que los blancos consiguieran su único gol del partido –logrado por Benzema, quien una vez más inició en lugar de Gonzalo Higuaín- antes del primer minuto tras forzar el doble error de Valdés y Piqué. Ahí tenía que aparecer la fortaleza psicológica que caracteriza al Barça.

Ángel Di María, uno de los siempre elogiados por Mourinho y extremo derecho de los blancos fue fundamental en la ejecución de la presión con constantes ataques por la banda de Eric Abidal. El ‘Fideo’ hizo un buen partido pero la extraña e increíble falta de eficacia de Cristiano Ronaldo en este encuentro hizo que los de Mou solamente pudieran anotar un gol.

Pero Barcelona también tenía su jugador desequilibrante por una banda. El chileno Alexis Sánchez –delantero que Guardiola eligió por encima del canterano Pedro- hizo lo que se le dio la gana con el portugués Fábio Coentrão, que tal vez fueron los nervios por disputar un partido de tal calibre que no lo dejaron ver una sola pelota e incluso lo llevaron a cometer un par de faltas violentas. A pesar de estas entradas del lateral derecho, el partido fue más de fútbol que de cualquier otro deporte relacionado con las patadas, algo que ya se extrañaba cuando se enfrentaban estos dos equipos. La actitud de los del Madrid, para el bien del fútbol, fue diferente.

En el medio campo, Mourinho había iniciado con dos volantes de recuperación: Xabi Alonso (crack) y Lass Diarra. Este último simplemente no es un jugador para hacer parte del equipo de la capital española y menos para disputar un clásico. Perdido totalmente en el partido, no encontraba el balón cuando Xavi, Iniesta y Messi tocaban. Y ni hablar del que lo reemplazó en el segundo tiempo: Sami Khedira. Si bien Iniesta es un maestro que da cátedra de fútbol cada vez que pone sus pies sobre una cancha, también fue evidente que el alemán Khedira se memorizó cada una de las letras que el volante del Barça tenía en su espalda. El jugador de la selección germana es otro hombre que no le aporta mucho al Madrid y que en su lugar podría estar incluso algún suplente del conjunto culé como el malí Seydou Keita que Pep se dio el lujo de poner faltando 11 minutos para el final del cotejo.

Y es que una de las diferencias entre las dos escuadras que favorecen al Barça es el banco de suplentes. Antonio Adán, Raúl Albiol, Álvaro Arbeloa, Sami Khedira, Kaká, Gonzalo Higuaín y José María Callejón estaban sentados al lado de Mourinho. José Manuel Pinto, Maxwell, Javier Mascherano, Seydou Keita, Thiago Álcantara, Pedro y David Villa acompañaban a Guardiola. Si se analiza cada jugador, uno por uno, pienso que la diferencia 
es notoria.

Pero así como este elemento favorece a los blaugranas, un aspecto en el que el Madrid se aventaja muchísimo es el arco. Iker Casillas es, lejos, el mejor arquero del mundo. Este señor, a pesar del anti récord que se llevó de este encuentro al convertirse en el arquero con la valla más vulnerada en la historia del Clásico, hace del arco madrileño un objeto casi hermético. Pero el hecho de que el 1 de la Roja sea el más destacado en su posición no le quita mérito a Sergio Ramos... ¡qué jugador! Desde que volvió a jugar de central la defensa blanca es otra. Personalidad, presencia, seguridad y unas barridas impresionantes –aunque a veces con mala leche y exceso de violencia- es lo que le aporta este sevillano a la retaguardia madrileña.

Pero este defensor tiene que enfrentarse a los soldados de Pep, que así como los de Madrid cumplen a cabalidad con la presión alta que les exige Mou, en Barcelona siempre descresta la facilidad con la que se desenvuelven los hombres en cualquier posición que se les ponga sin importar si es la suya o no. El ejemplo más claro en este partido fue Cesc Fàbregas. Un volante mixto jugando de ¡NUEVE! No es la primera vez, pero sentar a David Villa, goleador histórico de la selección española, es algo bastante cuestionable… hasta que Fàbregas la mete.

El partido terminó 1 – 3 a favor del equipo de Pep. Partido en el cual dos de los mejores estrategas del planeta expusieron sus dotes y trataron de hacer lo mejor para sus clubes y si bien el resultado no cambió mucho, lo que sí se vio distinto fue la actitud de los jugadores blancos. A pesar de salir derrotados frente a su público demostraron gallardía, humildad y tolerancia durante y después del partido abrazando a sus colegas catalanes y felicitándolos por la victoria y el gran partido realizado. Lástima que de nuevo el entrenador haya salido a adjudicarle la derrota a cuestiones extra futbolísticas, en este caso, la suerte.

Sin embargo, Mourinho está cumpliendo con una gran temporada, lo cual se ve reflejado en la actitud de sus jugadores, la equidad de puntos con el Barça aún con un partido menos y el puntaje perfecto en Champions con actuaciones demoledoras. Las facultades de Guardiola son sabidas pero también es (casi) imposible que un equipo de Mou estando tan bien, se caiga por un partido. La Liga está buena otra vez y la Champions, ni se diga. 

Después de este encuentro, y como ya lo vienen haciendo desde el inicio de la temporada, ambos conjuntos seguirán buscando llevarse los dos trofeos. Real Madrid y Barcelona: dos escuadras muy diferentes con idénticos objetivos.

Twitter: @pabloriosg

lunes, 21 de noviembre de 2011

Dos sillas y una mesa, por favor

Por: Juan Pablo López – Columnista invitado

La selección Colombia debió encarar la tercera y cuarta fecha de las eliminatorias clasificatorias rumbo a la Copa del Mundo 2014 frente a una crecida Venezuela, una siempre agrandada Argentina y a los propios regalos del elenco cafetero donados expresamente a sus rivales.

La Tricolor inició su ciclo con pie izquierdo, o mejor, con la pierna derecha de Falcao y su leve lesión que lo dejó por fuera de los dos enfrentamientos eliminatorios, pero afortunadamente Leonel Álvarez manifestó que “Jason lo reemplazaría”. A la lesión del “Tigre”, se sumó la del volante del Valenciennes Carlos Sánchez y la ausencia totalmente justificada de Juan Camilo Zúñiga por el nacimiento de su segundo hijo para el clásico bolivariano.

El estadio Metropolitano Roberto Meléndez de Barranquilla era una caldera empapada por la lluvia cuantiosa que caía para enfrentar a los venezolanos el 11-11-11. Las caras nuevas y discutidas, militantes en el fútbol local no fueron un impedimento para que Colombia dominara a la Vinotinto en la primera parte del compromiso; por el contrario, Vallejo, Bolívar y Dorlan contribuyeron a la genialidad párvula de James Rodríguez y al buen momento de Jackson para que todo derivara en un disparo balístico que desenfundó Fredy Guarín y que no pudo controlar el golero Renny Vega, terminando en las redes del arco visitante.

El desgaste se hizo evidente para ambos conjuntos, sin embargo, la Selección tuvo profundidad en algunas oportunidades, pero se erraron goles infames, como el de “Bocón” Gutiérrez (así tituló recientemente el Diario Olé en portada) debajo del arco. La lectura del partido era clara: darle aire al medio campo y al ataque, respectivamente, eran las variantes obvias que se debieron realizar, pero la lluvia torrencial ya había mojando el pelo de Leonel, cegándolo por completo y aumentando la desesperación de un público impotente.


Fue entonces cuando empezaron las intervenciones, visitas, reuniones, conferencias y aparentes discusiones entre Leonel y Comesaña, que tuvo que reiterar sus asesorías después del tanto venezolano tras un infortunado error del hombre del Atlético de Madrid Amaranto Perea. Técnico y asesor… perdón; técnico y asistente o, siendo más sensatos, asistente y técnico lograron coincidir, pero fue un poco tarde. Sólo quedaban tres minutos de juego cuando hicieron ingresar a Dayro Moreno. ¿A qué? Eso sólo se supo en las deliberaciones íntimas de Álvarez, Julio Avelino y el mensajero estrella Elkin Sánchez. Todo concluyó con el nefasto empate, quinto en la historia de los enfrentamientos contra el equipo del soberbio pero eficaz César Farías por eliminatorias sudamericanas.

Para el segundo compromiso la selección Argentina llegó en crisis, pero también son profetas en tierras ajenas y el público costeño contribuyó para que se sintieran locales con su calidez característica. La previa fue picante para el partido que se realizó en el calor dantesco e infernal de las 4:00 p.m. en “La Arenosa”, gracias al esfuercito que por fin hicieron Bedoya y compañía (lástima que nos salió el tiro por la culata) al no dejar que Don Julio cambiara la hora del partido para horas nocturnas de menos bochorno.


La Albiceleste no ganaba en tierras colombianas desde el año 2000, pero desde tiempos ochenteros siempre anotaron figuras rimbombantes como Jorge Burruchaga, Ramón Medina Bello, Claudio el “Piojo” López, Gabriel Omar Batistuta, Hernán Crespo o el “crack” contemporáneo Lionel Messi, y esta vez no fue la excepción por las ventajas que dio el equipo colombiano, facilitando su problema de “timidez” con pocas pero suficientes y certeras intervenciones en el juego.

El conjunto colombiano comenzó ganando gracias a un autogol de Javier Mascherano, pero el brasileño Salvio Fagundes hizo caso omiso y se lo anotó a Dorlan Pabón. Los gauchos culminaron los primeros 45  minutos totalmente reventados, pero para el segundo tiempo salieron mágicamente enteros, corriendo y descansando con la pelota en sus pies, mientras que Colombia se metió atrás cediendo la posesión del balón al equipo de Sabella. Cansada y carente de liderazgo, la Selección recibió el primer gol gracias a una desinteligencia en defensa, evidenciando que definitivamente los jugadores tampoco le colaboraron a Leonel Álvarez en su gestión para ambos partidos.

Todo en cancha pareció ser una crónica de una muerte anunciada, crónica que Comesaña no quiso revivir y reanudó las conversaciones arduas y extensas con Leonel, tanto así que el cuarto árbitro tuvo que interrumpir la jocosa plática de ambos estrategas. Julio Avelino y Álvarez no tuvieron dónde sentarse para poder analizar que hacer con un partido qué tuvo otro error colombiano que firmó la segunda anotación argentina por parte del “Kun” Agüero, pero lo peor fue que ni siquiera los cambios realizados por la presión del público en “Curramba” dieron solución a la debacle que fue Colombia en los segundos 45 minutos.


Retomando a García Márquez, él alguna vez afirmó que “la sabiduría nos llega cuando ya no nos sirve de nada”, pero esta vez pienso que la sabiduría ni siquiera llegó, simple y llanamente porque no existe tal madurez y bagaje en el cuerpo técnico, con el agravante de que no hubo una silla para que Comesaña se sentara apaciblemente a dilucidar con Leo qué era lo mejor para la Selección

Leonel había acotado que “contra Argentina hay que cuadrar caja”, pero sólo obtuvo un desfalco abrupto en los resultados y en el postpartido asintió lo siguiente: “Aceto que el único responsable soy yo”. El cinco legendario de aquellas selecciones Colombia de los noventa y ahora técnico de la Tricolor, eximió de culpas a sus jugadores, que tienen gran parte de la responsabilidad del funesto y ominoso arranque eliminatorio, pero en boca de todos el culpable y máximo responsable es Leonel Álvarez.

Ahora sólo me queda hacer una humilde petición al honorable señor Álvaro González, vía Luís Bedoya, de que ¡por favor! gestionen dos sillas y una mesita para que Leonel y Comesaña puedan verse en la penosa tarea de meditar tranquilamente a centímetros del terreno de juego el qué, cuándo y cómo hacer las elecciones y cambios tácticos adecuados, pertinentes y oportunos para los próximos compromisos que nos llevarán de regreso a un Mundial… claro, si es que no echan a Leonel mientras usted lee esta columna.

jueves, 17 de noviembre de 2011

¿Y ahora quién podrá ayudarnos?


Por: Nicolás Pareja Escalante- @Nicopareja

Estoy indignado. Aún sigo fastidiado por ese entorno mezquino que envuelve a la Selección Colombia y, no es posible que la gente adopte posturas ciclotímicas por simples impulsos. Primero, un personajillo algo peculiar,  se excitó con la presencia del reconocido periodista Fernando Niembro y,  le declaró todo su amor a la patria Argentina; reconociendo que cantaría los goles de su selección amada, la “gaucha”, de una manera ferviente.

Una vergüenza absoluta que la gente pierda de foco sus raíces, su idiosincrasia y, en general, su país. Continuando con los personajillos, como saltamontes brincaron varios periodistas a “sugerir” el cambio de dirección técnica de la Selección ante la execrable derrota frente a Lionel Messi y compañía.

¿Tenemos problemas en la Selección? Sí, y muy serios. El partido en la paz fue histórico por el triunfo, pero la evolución del partido no fue así. Comenzamos ganando y no supimos manejar el resultado, cosa que hubiera terminado en un empate si no hubiera sido por ese contragolpe letal que terminó en la celebración polémica de Falcao.

Luego, se nos vino Venezuela y, anduvimos por momentos bien y por momentos mal, sin lograr homogeneizar una regularidad que permita mostrar la identidad de un equipo, de un cuerpo técnico. Íbamos ganando con una granada que soltó Guarín e hizo explotar a todo el Metropolitano; pero regalamos terreno, nos presionaron y gracias a eso y a un “blooper” de Amaranto Perea todo finalizó en un empate con sabor amargo, muy amargo.

Argentina hizo polo a tierra en Barranquilla, y saltó al terreno con la esperanza de llevarse al menos un punto. El conjunto de Sabella no jugó a nada y el de nosotros tampoco. Ellos, con los destellos característicos de un top como lo es Messi, y sumándole un terrible error de Yepes y Ospina les alcanzó para volver a casa tranquilos.

Nosotros, nuevamente nos quedamos con esa amargura de ver un conjunto frenético y rápido pero sin brújula. Leonel Álvarez es un técnico sin experiencia, pero eso lo sabía Luis Bedoya y su junta directiva al elegirlo por descarte ante la negativa del ‘Tata’ Martino. Eso no es nuevo así que no vengan ahora, por si acaso, con el cuentico de dar un “timonazo” al asunto.

¿Dónde queda la palabra que tanto se pregona: PROCESO? No en vano Tabárez está en la Selección uruguaya desde el 2006 y César Farías desde el 2007. Han respetado sus tiempos de trabajo y los han dejado equivocarse, algo normal dentro de un proceso de formación para edificarse y así obtener resultados tangibles.

Ahora bien, ¿dejar a Leonel y que se siga equivocando? El fútbol no es como las matemáticas que dan un resultado exacto. Nadie nos garantiza que trayendo al mejor técnico del mundo el equipo va a ganar y así, después de tres largos Mundiales volver a una cita orbital.

Hay que rodearlo, darle confianza, seguridad y apoyo para que saque a relucir su experiencia en campo durante 21 años en el fútbol profesional. Para eso tendrá casi 7 meses en donde deberá replantearse y efectuar.

Las cosas están así: Llevamos jugados tres partidos de 16 que encierran las Eliminatorias y, apenas tenemos cuatro puntos de nueve posibles. Quedan en disputa 39 puntos, de los cuales como mínimo habría que conseguir 22(aprox) para así llegar a 26 unidades y pelear el repechaje.

En las Eliminatorias de Francia 98, el cuarto en clasificar fue Chile con 25 unidades, mientras que en el 2002 en Korea y Japón, Uruguay llegó al repechaje con 27 puntos y logró su paso al Mundial al vencer a Australia. Cabe recordar que Uruguay nos ganó ese derecho único por un gol diferencia.

Para la cita en Alemania 2006 y Sudáfrica 2010, Uruguay fue nuevamente el que atrapó la plaza de repechaje con 25 y 24 unidades respectivamente.

Estos episodios anteriores nos dejan visualizar que la cifra para luchar por el REPECHAJE está en 26 puntos promedio. Quedan 39 en disputa, por lo que habría que tener un rendimiento del 56 por ciento como mínimo para luchar por una plaza.

El tema está complicado y sería un suicidio cambiar de DT. En la vida como en el fútbol hay que ser equilibrados y arriesgar con lo que hay. Apoyemos a Leonel Álvarez con la misma enjundia que el costeño/argentino gritó el gol de Messi y los resultados van a llegar.

@Nicopareja

viernes, 28 de octubre de 2011

¡Bogotá es azul y blanco una vez más!

POR: NICOLÁS PAREJA ESCALANTE- @Nicopareja
La vida es un sucesión de etapas continuas sin saber lo que se viene. Como una baraja de cartas boca abajo en la cual segundo a segundo las vamos destapando y observamos cuál carta o suceso de la vida nos salió. Puede ser un intrascendente tres de rombos o el interesante as. Todo, fluctúa para bien o para mal, la vida gira y a todos nos toca jugar a la ruleta y a veces salir favorecidos y, otras no. Simple equilibrio universal dominado por “el de arriba”.
Hace 10 años no se ganaba nada; estábamos en una abstinencia absoluta cargada de humillaciones, malos resultados en lo deportivo y, un desorden administrativo que, ojalá, no vuelva nunca más.
Nos ilusionábamos con chispazos como el del 2007 en la Copa Sudamericana, en la cual se hizo un gran papel, pero no pelechó al final y nos eliminó el América mexicano en instancias semifinales. Eso fue una recarga de energía, pues la última vez que tuvimos todo para figurar y que no lo conseguimos fue en el 2003.
Me acuerdo muy bien que, ese 7 de Diciembre, el Campín estaba a reventar contra el Deportivo Cali. No le cabía un alma y los entonces dirigidos por Norberto Peluffo sólo necesitaban de un empate para desbocar a la afición en albricias y colocarnos en una final de Liga de la cual no somos partícipes desde 1988.
Mi corazón, si hubiera estado conectado a un electrocardiograma esa noche, hubiera marcado mi muerte con ese gol de Milton Rodríguez sobre la hora y que nos dejaba nuevamente por fuera de una tan anhelada final.
Así es la vida y así es el fútbol. Ayer nos tocó de nuevo pisar una final y por fin nos llegó la hora. ¿Es una Copa menor? Sí. ¿Da cupo internacional? Sí. ¿Da un dinero significativo? Sí. Y más allá de esto es el salir de la penumbra en la que estábamos. Es la cuota inicial para ganar la Liga, el oxígeno necesario para sentirnos una vez más campeones y, el premio a una nueva administración.
Un partido de película, no por su desarrollo en lo colectivo o técnico, sino por el marco, por la adrenalina que se disparaba con cada remate y atajada. Porque ver botar el penal a Mayer significó transportarlo al infierno y, minutos después, de manera bipolar, endiosarlo por su cambio de ritmo y definición sutil con la parte externa de su talentoso botín.
Es un lindo renacer. Millonarios es campeón, pero todos debemos estar con los pies en la tierra. La Liga continúa y es un equipo muy irregular (como todos los del campeonato); con una defensa lenta y endeble, pero con un ataque formidable. El DT Páez, debe ser el gestor de encontrarle un equilibrio notable al equipo y así, clasificarnos entre los ocho finalistas y, cada vez alejarnos más de la zona de promoción y descenso.
Hinchas de Millonarios: celebren y disfruten porque para muchos es la primera vez que ven al equipo campeón. Gócenla con fervor y sobre todo humildad y equilibrio emocional, porque el fútbol como la vida misma da muchas vueltas; hoy estamos arriba, mañana no sabemos…
Twitter: @Nicopareja






lunes, 24 de octubre de 2011

¡Triunfazo histórico!

Por: Pablo Rios González

Hace ya casi dos semanas nuestra Selección hizo su debut en las Eliminatorias que darán cuatro cupos y medio para el Mundial de Brasil en 2014 y la ‘Tricolor’ inició de la mejor forma posible: le ganó a Bolivia por 2 a 1 en La Paz. Resultado inédito. La Selección Colombia ganó por primera vez un partido en La Paz a Bolivia por Eliminatorias.

Y no sólo eso; otro dato importante es que nuestro combinado no conseguía los tres puntos en la primera fecha del certamen desde el 24 de abril de 1996, partido en el cual le ganamos a Paraguay por 1 a 0 en Barranquilla. Vale la pena recordar que dichas Eliminatorias fueron las que nos llevaron a nuestro último Mundial en Francia ’98. Buen indicio para lo que se viene.

En el partido disputado en la tarde del 11 de octubre, Leonel se salió con la suya. Desde el principio lo había hecho. Convocó a los que él quiso sin que nadie le impusiera nombres y se la jugó con toda al revelar la alineación titular sin Falcao dentro de los 11. Medio país se le fue encima pero a él no le importó: sabía lo que estaba haciendo y le salió a la perfección.

“¿Cómo no va a poner a Falcao sabiendo que los bolivianos son flojísimos por arriba?”, decíamos algunos. “Falcao es el goleador de nuestra Selección y TIENE que ser titular”, señalaban otros. “Dejar por fuera a Falcao es sentar 40 millones de euros en el banco”, alcanzó a remarcar uno de los periodistas deportivos más reconocidos de Colombia. "Falcao le teme a la altura y el DT Álvarez lo saca del onceno", tituló el diario de Bolivia ‘Página Siete’. He ahí el porqué del lamentable festejo del ‘Tigre’ tras el agónico gol. En ese momento, García pudo haber olvidado todo tipo de comentarios absurdos y gritar el gol como lo hicimos (imagino que) todos los colombianos. Una locura intensa olvidándonos de cada uno de nosotros mismos y abrazándonos con cualquier persona así no la hubiéramos visto jamás en la vida. Era un solo grito de gol en un millón de voces.

Teófilo Gutiérrez, elegido por Leonel por encima del ‘Tigre’, a pesar de que no marcó, cumplió a cabalidad con su papel. El jugador de Racing participó en casi todas las jugadas de ataque que generó el seleccionado colombiano e incluso dio el pase gol a ‘Memín’ en la primera anotación del partido. Teo hizo lo que Álvarez le pidió: tuvo la pelota cuando hubo que hacerlo y la manejó con inteligencia.

Cuando la transmisión de televisión mostró la alineación inicial de Colombia más de uno nos quedamos sorprendidos con el portador de la ‘5’: James Rodríguez. El jovencito de 20 años que juega en el Porto de Portugal iba a tener en su espalda el número por el cual se denomina a volantes de contención rústicos, duros y de pierna fuerte como los que fueron Mauricio ‘Chicho’ Serna o incluso nuestro actual DT Leonel Álvarez.

Estos jugadores están lejos de las características manejadas por James: jugador de una calidad exquisita, talentoso y con una zurda privilegiada. El ex Envigado hacía su debut en la Selección y en su primer partido ya iba a ser titular. ¿Si se asustó? Para nada. Si bien Rodríguez empezó el partido algo ansioso y cometiendo faltas peligrosas e innecesarias, después organizó su cabeza y se dedicó a hacer lo que más sabe, desplegar habilidad con la pelota en sus pies.

James, con apenas dos décadas de vida, fue la figura de nuestra Selección y tuvo unos huevos lejos de un chico de su edad que, normalmente, entraría con miedo a un partido de semejante importancia para toda una nación. El coraje y valentía que demostró a lo largo del partido –mismas  virtudes que evidenció Leonel a la hora de armar el equipo- SÍ son cualidades dignas de un número ‘5’. Además, en la segunda parte el cucuteño fue el líder del ataque de nuestro cuadro.

Dorlan Pabón hacía su debut oficial como titular en la ‘Tricolor’ y estuvo a la altura. ‘Memín’, quien a lo largo de todo este semestre se ha cargado a Atlético Nacional al hombro, tuvo la actitud que siempre lo caracteriza: no se achica ante nada –en este caso la altura- ni ante nadie, a pesar de que el rival es el más débil de las Eliminatorias. El volante externo desperdició varias oportunidades de gol pero ni siquiera esto hizo que su cabeza de desmoralizara y en la primera que tuvo en el segundo tiempo definió con una calma extraña en él; tras un pase fenomenal de Teófilo Gutiérrez, amagó una vez y después la colocó al lado del palo derecho del arquero Arias. Imposible de atajar. Golazo de Colombia. Si sigue así, es poco probable que Dorlan dure mucho más en el equipo verdolaga.

Lo de Fredy Guarín estoy seguro de que, al igual que a mí, a muchos no les sorprendió. Todos somos conscientes de la capacidad que tiene este volante para ser líder de la Selección y manejar el medio campo a su manera. Impuso orden y se jugó un partidazo. Lo realizado en el primer tiempo lo dejó tan cansado que a los 69 minutos del juego tuvo que darle paso a Diego Chará, hombre del cual se esperaba más. De todas maneras, es un jugador que hay que seguirle dando la oportunidad y no matarlo por 20 minutos, ya que ha demostrado que tiene jerarquía para conformar el sector de volantes de nuestro equipo representante.

El triunfo fortalece a todo el plantel mental y anímicamente, además de que opaca un poco los desaciertos cometidos. Igual, como se dice dentro del fútbol, “es mejor corregir los errores ganando”. Colombia va a tener que lograr esto porque si bien la defensa no estuvo del todo mal, se notó la ausencia de Mario Alberto Yepes. Faltó categoría, garra y liderazgo en la parte de atrás. Lastimosamente el capitán no va a ser eterno y quién sabe si llegue al Mundial en caso de que clasifiquemos. Por esta razón y a pesar de que lo vamos a extrañar, a Yepes hay que ir sacándolo de a poco. Por el lado de los laterales, hay que decir que Zúñiga y Armero no incidieron en ningún momento en el desarrollo del partido. Es otro aspecto para mejorar.

Al final del cotejo, las lágrimas de Amaranto nos conmovieron a todos. No era exclusivamente el llanto de él. Éramos cada uno de nosotros viéndonos ahí reflejados. Emoción pura y un sentimiento patrio que a todos nos compete y nos une. La exaltación por haber ganado un partido en una cancha en la que han perdido incluso equipos como Brasil y Argentina y sobre todo la manera en que se triunfó, ameritaba eso y mucho más. Esa sensación agónica y fulminante de marcar en el último suspiro de un duelo nos hace sentir orgullosos de ser colombianos.

Esperemos que sea el primero de muchos triunfos en esta carrera por conseguir un cupo para 2014 y terminar de una buena vez el letargo de no asistir a los Mundiales.

Por ahora podemos seguir disfrutando de esa victoria memorable y darle las gracias a esos once guerreros que sudaron por todo el país y nos demostraron que en realidad quieren la camiseta.

¡Gracias Amaranto por esas lágrimas! ¡Gracias Colombia por el triunfo!... esperemos que se repita.

Twitter: @pabloriosg

jueves, 29 de septiembre de 2011

La convocatoria: caras nuevas que ilusionan

Por: Pablo Rios González

Leonel Álvarez, flamante DT de la Selección Colombia de fútbol, realizó su primera convocatoria oficial de cara a las Eliminatorias para el Mundial de Brasil 2014 y en su lista hay unos cuantos nombres que llaman la atención… para bien, afortunadamente.

Las principales novedades entre los llamados por Álvarez son: James Rodríguez, jugador más destacado y símbolo de la Selección Colombia Sub-20 y que actúa en el Porto de Portugal; Dorlan Pabón, figura del campeón colombiano Atlético Nacional; Diego Chará, actualmente en la MLS con los Portland Timbers; y la vuelta del crack, que seguramente tendrá la número 10, Giovanni Moreno del Racing Club de Avellaneda.

James Rodríguez, el jovencito de 20 años que tuvo un paso (más bien) fantasmal por el fútbol colombiano y emigró rápidamente a Banfield en Argentina, hizo un gran papel en el Mundial de su categoría que se realizó en nuestro país y enamoró a todo el público compatriota. Esta es una gran chance para que demuestre todo su potencial y empiece a brillar dentro de los grandes -ahora sí- como uno de los grandes futuros de nuestro combinado.

Dorlan Pabón es la figura indiscutida del último equipo en dar la vuelta olímpica en Colombia y, sin duda alguna, uno de los mejores jugadores de nuestro balompié. ‘Memín’, quien ha dado cátedra de cómo un solo jugador se puede echar un equipo de la talla de Atlético Nacional al hombro, hace rato que pedía Selección a gritos pero con fútbol. Y no sólo lo pedía él, también lo hacían (todos) los hinchas del deporte en Colombia. El ‘Bolillo’ lo tuvo en cuenta un par de veces para amistosos, pero el volante no entró en la lista definitiva de la Copa América. Igualmente eso ya quedó atrás; ahora Dorlan tiene su oportunidad de trasladar el futbol que destella en el ‘Verde’ a la Selección. Esta también es una chance para ‘Memín’ a la hora de mostrarse al exterior.

¡Por fin el ex Tolima Diego Chará! Jugadorazo. Este vallecaucano de 25 años tenía que haber estado en la Selección desde que mostró todo su talento y jerarquía con el conjunto ‘pijao’ en la Copa Sudamericana del año pasado. Este ‘5’, junto con Wílder Medina (pobre Wílder) y el argentino Rodrigo Marangoni eran la base del equipo subcampeón que dirigía Hernán Torres. ‘Bolillo’ nunca se fijó en él, y ahora que está ‘perdido’ en Estados Unidos Leonel lo llama para darle una oportunidad de manera bastante acertada. Chará, como bien lo dijo el periodista Alejandro Pino, es un volante de mucho despliegue, mucho físico y que tiene mucho qué aportar a nuestra querida ‘Tricolor’. Este mediocampista, ¿por qué no?, en unos años podría ser el reemplazante natural en Colombia del monstruo Fabián Vargas.

Y por el último, la vuelta del ya habitual Giovanni Moreno tras sufrir una dura lesión (rotura de ligamentos de su rodilla izquierda) que lo tuvo seis meses por fuera de las canchas. En el equipo que jugó la Copa América no había un solo ‘10’ y a pesar de que el equipo tuvo un buen funcionamiento, la presencia de un jugador diferente, con clase, que maneje y tenga la pelota en los momentos complicados y de mayor presión en un partido es fundamental dentro de un plantel. Gio lo es. Era tanto lo que se notaba la ausencia de un enganche en el equipo que la camiseta con el número del ‘Flaco’ la usó ¡Cuadrado!, ¿Cuándo más se ha visto un lateral con la número diez en su espalda? Para la alegría y tranquilidad de la mayoría, Moreno está de vuelta.

Está claro que se inicia una nueva etapa en la Selección y lo reflejado en los nombres ilusionan al pueblo colombiano. La gente está entusiasmada con el nombramiento de Leonel y los dos partidos amistosos que se ganaron en Estados Unidos bajo su mando. La alineación titular ya queda toda en manos del DT pero los 23 futbolistas que figuran dentro de la plantilla dan la serenidad suficiente como para seguir confiando en Leonel.

Ahora sólo queda esperar a que el juez central del encuentro vs. Bolivia dé el pitazo inicial y veamos a once colombianos que nos representan dando la vida por el amarillo, azul y rojo. Y así, de esa manera, como dijo nuestro entrenador: “Empezaremos a comprar los tiquetes para Brasil desde ya”.

Twitter: @pabloRiosg


LISTA DE CONVOCADOS 

Arqueros:

David Ospina - Nice (Francia)
Breyner Castillo - Medellín (Colombia)
Robinson Zapata - Pereira (Colombia)


Defensas:

Mario Yepes - Milan (Italia)
Aquivaldo Mosquera - América (México)
Luis Amaranto Perea - Atl. Madrid (España)
Cristian Zapata - Villarreal (España)
Pablo Armero - Udinese (Italia)
Camilo Zúñiga - Nápoli (Italia)
Juan Guillermo Cuadrado - Lecce (Italia)
Juan David Valencia - Junior (Colombia)


Volantes:

Abel Aguilar - Hércules (España)
Fredy Guarín - Porto (Portugal)
Carlos Sánchez - Valenciennes (Francia)
James Rodríguez - Porto (Portugal)
Diego Chará - Portland Timbers (Estados Unidos)
Dorlan Pabón - Nacional (Colombia)


Delanteros:

Adrián Ramos - Hertha (Alemania)
Teófilo Gutiérrez - Racing (Argentina)
Falcao García - Atlético de Madrid (España)
Jackson Martínez - Jaguares (México)
Dayro Moreno - Tijuana - (México)
Giovanni Moreno - Racing (Argentina)

viernes, 23 de septiembre de 2011

Otra vez

Por: Nicolás Pareja Escalante
Otra vez se nos vienen las eliminatorias a un Mundial, otra vez arrancamos de cero un nuevo proceso y,  tanto usted como yo, amigo lector nos ilusionamos de tal manera, que pensaríamos que van a destituir al personajillo de Juan Manuel Corzo del Senado.
Cargado de esperanza, confío que este letargo de tres Mundiales a los que no asistimos finalice de una buena vez.
Hay material suficiente para que vayamos  a Brasil, siempre y cuando, el técnico sepa elegir los intérpretes adecuados para cada ocasión y, logre motivarlos a que le cumplan de manera óptima su elección en cuanto al dibujo táctico. Es vital el matrimonio de estos dos ítems respecto al encuentro a disputar.
Inauguramos este proyecto contra la siempre complicada Bolivia en La Paz. Ojalá no salgamos a la cancha timoratos y agazapados como la mayoría de los equipos que van a hacer duelo allá.
Ojo, no digo que vamos a presionar en la altura, pero no podemos quedarnos esperando que el rival tome rienda suelta y nos termine haciendo pasar un ridículo inmenso como el que pasó la Argentina de Maradona, o nuestra misma Colombia en las eliminatorias al Mundial del 2006 cuándo perdimos  4-0.
Algo que me preocupa, en cierta manera es nuestra defensa, el señor Mario Alberto Yepes es suplente indiscutido en el irregular Milán, que aún no despega en el Calcio.
Amaranto Perea, de cuatro fechas disputadas en La Liga, únicamente ha sido titular en dos encuentros y, posicionándose como lateral derecho, no lo ha hecho mal, pero no está con ritmo progresivo y más jugando en una posición diferente a la que desempeña en la Selección.
En cuanto a nuestros “eléctricos” laterales pasa algo similar. Walter Mazzarri, utiliza de manera intermitente a Camilo Zúñiga en el Napoli, ubicándolo en posiciones contrarias a las habituales, juega de volante por derecha o recientemente, desempeñándose por el sector izquierdo.
Él protagoniza distintos papeles que en la Selección, lo cual también hay que tener en cuenta.
El Calcio lleva disputadas tres fechas, de las cuales Pablo Armero únicamente ha dicho “presente” de manera titular en su último encuentro contra el Milán. Aquí, nuevamente lo realiza de volante externo con funciones ofensivas mucho más definidas.
Por lo que volvemos a lo mismo, no están en una competencia continua y, cuando lo hacen es en un posicionamiento distinto. No hay de otra, ellos serán nuestra defensa junto con Cristian Zapata, el cual espero impere sobre Yepes porque mal o bien, al menos viene jugando.
De acá para adelante no hay mayor inconveniente. Me la juego con una segunda línea “falsa” de cuatro con rápidas transiciones de defensa-ataque y viceversa.
Por los costados irían James Rodriguez y Dayro Moreno, mientras que en la mitad haría un doble cinco con Guarín y el “anti Messi” Carlos Sánchez. Claramente, Freddy tendría responsabilidades más flexibles para liberarse al ataque.
Y para la cuota goleadora, ¿qué mejor que unir a los "adictos" al gol? Me refiero al “tigre” Falcao, que viene manteniendo un rendimiento superlativo en su nueva casa y, a uno de los ídolos de la Academia en la Argentina: Teófilo Gutiérrez.
Una dupla de lujo y explosiva que esperemos sea abastecida de la misma manera que sus movimientos lo indican.
Alternativas hay suficientes para ir con un fuelle importante; Vladimir Marín, Víctor Montaño y Giovanny Moreno son las más resonantes.
Marín y Montaño mantienen un excelente nivel en sus respectivos clubes, resaltando a Montaño, quien ha marcado una huella significativa y constante. Es goleador de su actual equipo, el Rennes, en donde ha convertido cuatro goles en siete partidos corridos de la Ligue 1.
Mientras que al “flaco”, que sale en cada partido con unas pinceladas de no creer, lo dejaría para la parte complementaria. Buscando, a través de su individualidad, un desequilibrio cuando las piernas del rival estén desgastadas.
Nuevamente nos encarrilamos y, el primer paso es importantísimo darlo con firmeza para marcar un camino llevadero. Las mejores energías para superar este inicial reto y así, finalmente estar otra vez en un Mundial.

Twitter:@Nicopareja


viernes, 16 de septiembre de 2011

Así es más difícil

Por: Pablo Rios González

Para nadie es un misterio que el Atlético Nacional que ganó el torneo hace ya casi tres meses, no es el mismo de ahora. El Verde dejó ir a tres de sus más importantes figuras –y actores fundamentales en la última consagración ‘verdolaga’-, como lo eran Jairo Palomino, Víctor Ibarbo y Macnelly Torres.
Pero el problema no es tanto que se hayan ido, sino que no se reemplazaron de la manera en que se debía. No quiero pensar que los dirigentes a la hora de contratar jugadores se olvidaron de que era Atlético Nacional al que iban a reforzar, y no cualquier equipo chico.

Avilés Hurtado, Diego Álvarez, Daniel Torres (¡maldita sea!) y Jonathan Álvarez fueron los escogidos por los dirigentes. Nada que ver con lo que se trajo para el campeonato pasado: Macnelly Torres y John Valencia son los que más se destacan. Si bien son jugadores algo ‘pecho frío’, por su calidad: ESOS SÍ SON REFUERZOS PARA ATLÉTICO NACIONAL. Aunque obviamente no se puede dejar de lado que Carlos Rentería también fue un jugador que llegó al plantel el semestre pasado y que fue importantísimo en la consecución del título –fue el goleador del equipo-, también hay que reconocer que sin la magia y las asistencias de Macnelly Torres, Rentería no hubiera llegado la cantidad de goles que consiguió en el campeonato. (Esa dupla me hace acordar a la que tuvo el Verde en 2007 con Aldo Leao Ramírez y Carmelo Valencia).
De los hombres que llegaron al cuadro antioqueño para este campeonato el que más ha rendido es Avilés Hurtado, ex América de Cali; muchos hinchas dicen que con Hurtado ya no se acuerdan de Ibarbo… yo no pienso lo mismo. Independientemente de que Avilés esté haciendo un buen papel, Ibarbo era un jugadorazo y no se puede olvidar. De todas maneras, esperemos que Hurtado siga rindiendo y dándole alegrías al Verde como ya lo hizo con el gol que le anotó a su ex equipo.

Después está Diego Álvarez, jugador proveniente del Deportivo Cali pero totalmente identificado con el Deportivo Independiente Medellín y sus goles al Verde de Antioquia. A pesar de que mostró garra y ganas de sobresalir en el equipo en su debut versus Envigado (entró a jugar de 9, su posición habitual,  pero parecía un 5), este delantero sabe que no la tiene fácil con la hinchada por su pasado, y como está consciente de esto hace todo lo posible por ganársela. Mientras responda con méritos y, sobre todo, goles, es lógico que la gente se olvide de sus antecedentes.
Jonathan Álvarez es el refuerzo que la tiene más difícil: su objetivo es “llenar los guayos” de Macnelly Torres. Si bien el paisa -también proveniente del Cali-, al igual que Macnelly (pero en menor escala), es un jugador muy talentoso, ha tenido poca participación en estas cinco fechas por culpa de las lesiones, pero está claro que es una joya que Nacional debe explotar. Uno de los problemas principales que ha tenido el Verde en lo que va de la liga es la ausencia de un jugador que tenga la pelota, que maneje los tiempos y que pongas pases de gol. En resumidas cuentas, lo que era Macnelly, un 10. Álvarez, en buen estado físico y de salud, puede ser el jugador idóneo que reúna estas características.

Y por último, Daniel Torres (¡maldita sea!, otra vez); no me imagino lo que dirá Palomino –y las caras que hará- viendo los partidos del Verde en Arabia Saudita. La verdad, me parece un jugador impresentable para un equipo como Atlético Nacional; parece que Santa Fe estaba encartado con este tipo y para perjudicarnos, nos lo mandó. No quita una pelota, no hace un pase bien y sólo comete faltas (en el partido del miércoles vs. Junior dejó al equipo con un hombre menos a falta de más de media hora para que se acabara el partido). No sé en qué estarían pensando los dirigentes ‘verdolagas’ en el momento en que lo contrataron.
Algo bueno que podemos rescatar de todo esto es que sigue Dorlan Pabón; lo malo, es que está solo… ahora volvimos a ser totalmente dependientes de ‘Memín’ en el ataque (recordemos que ya nos pasó en el segundo semestre de 2010) y sabemos que él es ALGO angurriento con la pelota y rara vez hace un pase gol en vez de terminar la jugada él. El miércoles contra Junior en Barranquilla pudimos ver sus dos caras: hizo una ‘jugadota’ en el gol de Rentería que incluyó la asistencia y también pateó al arco en ocasiones que la terminación requería de un pase y no precisamente de un remate suyo.

Hasta ahora, la tarea más complicada la tiene el ‘Sachi’ Escobar, que en torno a lo que hay en Nacional –que igual no es poco- y a los “refuerzos” que trajeron, tiene que encontrar un once titular sólido (todavía no ha podido) y que rinda como debe hacerlo un equipo de la envergadura de Atlético Nacional.
Igualmente, por el lado del DT no hay problema, porque DT es lo que hay; pero también está claro que así, con el plantel que hay ahora –y sobre todo comparándolo con el de hace seis meses- la cosa es más difícil, pero obviamente se puede... y más en un torneo como el nuestro, en el que cualquier equipo puede salir campeón.

Twitter: @pabloriosg

domingo, 11 de septiembre de 2011

Fútbol argentino: ¿bueno o malo?

Por: Nicolás Pareja Escalante

El tan apasionado y de buen nivel fútbol argentino es de viejas glorias. Hoy por hoy, la salud del balompié gaucho está como dice el polémico periodista Martín Liberman: “el fútbol argentino es un enfermo terminal”.
Comparto en totalidad su idea, pues el fútbol argentino se encuentra sumido en un bajísimo nivel y, claro está,  no se debe confundir lo que es un torneo reñido con uno que sea competitivo, ya que la línea que divide ambos es muy fina y hay que saberla desglosar.
Equipos como, C.A Banfield, que no tienen una base de fundamentación estructurada, ni un eje conductor que los ilumine por el sendero negro que atraviesan es un claro ejemplo. 
Pareciera que salen a la cancha a improvisar, a ver qué les sale, sin una idea clara de transiciones, como si el técnico directamente no les diera la más mínima indicación. ¿Por qué tanta irregularidad en un equipo que salió campeón del Apertura 2009? Esperemos La Volpe logre enderezar el asunto, pero fácil no está.
Ni indagar en River Plate, que se encuentra nadando en la fuerte corriente del Nacional B. Lo está desarrollando a cabalidad pero, ¿un torneo del prestigio del fútbol argentino sin uno de los llamados grandes es atractivo? Imagínense un torneo sin el Real Madrid en España; o sin el Manchester United en la Premier… Algo absurdo.
Con una alta complejidad se logra ver uno que otro encuentro con buena predisposición de pases, con laterales que erosionen las bandas de manera sorpresiva y estudiada. Un equipo que de verdad genere situaciones a base de dinámica, velocidad y precisión.
Últimamente, los que llevan la batuta por su estilo instaurado del buen trato al balón son: Vélez Sarsfield, Estudiantes de La Plata y el Club Atlético Lanús. El primero no ha comenzado con mayor fuerza el torneo local, se le nota desarticulado y sin la misma fluctuación de antes.
Claro está, en gran medida, se debe a que parte de su base fundamental de jugadores (Santiago Silva, Maxi Morales y Ricardo Álvarez) fueron vendidos al extranjero. Sin duda que repuntará de la mano de Ricardo Gareca, una Biblia.
Estudiantes de La Plata es el de peor arranque. Muy mal en el Apertura con 6 partidos disputados y aun ninguno ganado. Lo grave del asunto, es que el equipo no juega a nada y tiene forma gelatinosa. Quedó eliminado anticipadamente de la Sudamericana frente a Arsenal de Sarandí y, Miguel Ángel Russo, le da y le da vueltas al equipo pero no logra encontrarle el norte.
Lanús, el menos afectado de los tres se posiciona mucho mejor en el torneo, marcha tercero con 11 puntos. Lastimosamente también quedó eliminado rápidamente de la Copa Sudamericana frente a su similar de Godoy Cruz, pero aun muestra esa casta que lo ha mantenido animador del campeonato.
 Tiene nómina suficiente para rendir y más de la mano de experimentados como Mauro Camoranesi, Mariano Pavone, Diego Valeri o el uruguayo Mario Regueiro  por nombrar un poco de su amplio material.
Si el buen juego está decreciendo en las escuadras de afable pie, ya podrán imaginarse el resto de equipos. Estos se distinguen, de manera sobrenatural, por su falta de capacidad técnica, por pegar, correr y revolear. Una constante en este fútbol.
Muy triste que, una de la mejores ligas de todo el continente americano sea tan pobre. Ojalá se mejore con conciencia técnica, se mantengan los procesos y se aísle un poco el resultadísmo aniquilador. Porque apunta de la pasión y del folklore no alcanza.
De no renovar el sistema, el fútbol argentino seguirá muriéndose poco a poco, al igual que un enfermo terminal…

Twitter:@Nicopareja